Es maravilloso, fantástico, mágico, como se quiera decir, pero sigue siendo un Final Fantasy y eso es siempre una maravilla (despojos como el XII a parte).
Este sitio utiliza cookies para ayudar a personalizar el contenido, adaptar su experiencia y mantenerlo conectado si se registra.
Al continuar usando este sitio, usted acepta nuestro uso de cookies.