Análisis Final Fantasy XIV: A Realm Reborn PS4
El pasado 14 de abril se lanzó en PlayStation 4 la última obra online de Square Enix, Final Fantasy XIV: A Realm Reborn. El videojuego consiguió lucir de manera espectacular en su versión para PlayStation 3. De hecho es casi milagroso que el título desbordara tanta calidad gráfica en un sistema de entretenimiento tan limitado como es la consola de generación pasada de Sony. El siguiente paso era obvio, lograr algo similar con PlayStation 4… y lo ha conseguido, vaya que sí.
Final Fantasy XIV: A Realm Reborn es el mismo juego que el aparecido ya hace tiempo en PlayStation 3 y PC así que si queréis algo más de información sobre el título, tan solo tenéis que leer el análisis que realizamos en su día para la versión PS3. En esta versión destinada a PlayStation 4 vamos a tratar las diferencias gráficas y técnicas con respecto a las versiones previamente citadas.
¿Tienes PS4? Sí. ¿Tienes PC? Sí. Además si disponemos de la versión para PlayStation 3 y recientemente hemos adquirido una PlayStation 4, podremos actualizar la versión de pasada generación a la actual sin coste alguno. ¿Qué porqué pensamos que es mejor la versión para PlayStation 4 frente a la de PC? Por comodidad, calidad y prestaciones.
Final Fantasy XIV: A Realm Reborn transcurre en un mágico mundo llamado Hydaelin. La variedad de localizaciones, edificios, fauna, clima y culturas está a la orden del día y el videojuego lo representa mediante un trabajo artístico impresionante. Esta versión permite ver todos estos detalles a una resolución 1080p, una diferencia abismal si lo comparamos con la versión de PlayStation 3 que funciona a 1152×640 reescalado a 720. La definición de las texturas es en ocasiones incluso mejor que en la versión para PC, aunque muy levemente y casi siempre en la ropa de los personajes. No hay confirmación oficial sobre esta divagación pero las rugosidades, costuras y demás detalles sí parecen haber sido mejoradas en PlayStation 4.
Otra de las maravillas es que de forma inicial, Final Fantasy XIV: A Realm Reborn funciona a 60fps con algunos bajones de manera ocasional cuando hay mucha carga gráfica o escenarios cargados de personajes como por ejemplo, Revenant’s Toll, el pueblo donde los jugadores de más alto nivel suelen reunirse. Aún así hemos podido comprobar que el rendimiento no baja prácticamente nada pero si ello es una molestia es posible configurar el juego para que corra a 30 fps estables desde el menú del sistema.
La falta de frames de animación que sufría exageradamente la versión para PS3 aquí no existe ni en nuestro personaje ni en los que aparecen en nuestro campo de visión. Además en éste último aspecto se han hecho mejoras evidentes así que ahora es posible discernir elementos del escenario mucho más lejos que la anterior versión, apreciar más detalles en la lejanía, mejor resolución de los elementos etc…
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Hemos probado Final Fantasy XIV: A Realm Reborn también en mazmorras y raids para 8 y 24 personas y el resultado no podría haber sido mejor. Si ya en un pc no existía prácticamente ningún problema en hacer funcionar estos mapas cerrados y con tan pocas vías de escape, en PlayStation 4 no iba a ser menos. Además los efectos gráficos que se acumulan (exageradamente en ocasiones) en mazmorras de banda como Crystal Tower no empañan el rendimiento del videojuego. Lo único que hemos notado en nuestras partidas es que PlayStation 4 emplea un par de segundos más para la carga de mapas, escenarios e instancias con respecto a un PC cualquiera.
Final Fantasy XIV: A Realm Reborn en PlayStation 4 es instalar el juego y jugar. No hace falta realizar ninguna configuración para que funcione perfectamente, se asocia a tu ID de PlayStation Network, tiene trofeos variados y además es posible conectar a nuestra consola un teclado y ratón USB con lo que pasaría a ser como si jugaramos en ordenador. De hecho nosotros hemos hecho las pruebas con esta última opción (además de probar el manejo con DualShock 4) y el resultado no podría ser más satisfactorio. Tanto teclado como ratón eran inalámbricos y respondía con eficiente rapidez.
Las ventajas que propone son varias. La más importante es la de transmitir a través de Twitch.tv y UStream nuestras partidas sin que afecte al rendimiento general del juego, algo que en PC es inviable a no ser que dispongamos de captura. Parece que no, pero los clanes suelen utilizar estos servicios en el caso de que se enfrenten a un duro jefe para así, los miembros que están en el “banquillo”, puedan aprender como derrotar al malvado enemigo que complica el avance del grupo. Aun así, siempre se puede utilizar el botón Share para compartir tus mejores momentos en Facebook y Twitter, ya sea una foto de grupo, la obtención de tu nueva armadura o simplemente, haceros una foto demostrando al mundo que habéis superado una mazmorra.
Otra de las opciones que nos permite Final Fantasy XIV: A Realm Reborn es que se puede manejar con PlayStation Vita. Hay que reconocer que éramos escépticos con esta opción y la verdad, si controlamos el videojuego con DualShock 4, es posible jugarlo de manera más o menos cómoda en la portátil. Como siempre, el panel táctil trasero hará de botones L2 y R2, algo que puede ser algo incómodo en combates que requieran de precisión. También tenemos que desaconsejar el uso del control remoto si hemos optado por jugar mediante teclado y ratón ya que esta preferencia seguirá siendo por defecto la que se use en PlayStation Vita y por ende, imposible de jugarse en condiciones.
Final Fantasy XIV: A Realm Reborn es la mejor versión de todas las aparecidas hasta el momento. No solo porque a la vista hayan detalles nimios de menor o mayor calidad que en PC, sino por todas las ventajas que ofrece con respecto a las demás le posicionan en primer lugar. Square Enix, una vez más, ha hecho un espectacular trabajo dejando en ridículo a los demás mmorpgs aparecidos en las dos últimas consolas de Sony. Si con PlayStation 3 consiguieron como ya dije un milagro, con PlayStation 4 han logrado que el desembolso de dinero hacia la última versión no caiga en saco roto.
Ya puedes descargar Final Fantasy XIV: A Realm Reborn desde aquí