Análisis Tiger Woods PGA Tour 14

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Vuelve el “tigre” un año más para traernos esta vez a las mayores leyendas de la historia del golf.
Por Manuel Gimeno 29 marzo, 2013

Es ya una tradición totalmente consagrada que Electronic Arts apueste de manera fuerte por ofrecer una propuesta de simulación notable en aquellas disciplinas que gozan de gran difusión en la mayor parte del mundo. La división EA Sports se ha encargado de llevar a cabo tan ambicioso fin, proponiendo para ello todo un amplio abanico de deportes que, dependiendo de cada lugar, logran desatar un inusitado interés entre aficionados que buscan una interacción alternativa a la práctica real.

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Seguramente en España el máximo exponente de todo esto haya sido durante muchos años la saga FIFA – después de la desaparición de la propuesta baloncestística NBA en Electronic Arts –, sobre todo en la actual generación, en la que se ha impuesto con mano de hierro a su ya habitual competidora nipona. Se entiende entre otras cosas por la importante fama y difusión con la que cuenta el deporte rey en nuestro país, arraigado de una manera tal que supone ciertamente el movimiento deportivo más importante de todos los que gozan de algún tipo de seguimiento.

Sin embargo, no por ello dejan de existir otros tantos con un carácter propio que se remontan a algún determinado hito años atrás. Éste sería el caso del golf, por ejemplo, deporte que cuenta con una tradición más que notable, estableciéndose su punto más álgido asociado a la trayectoria del siempre legendario Severiano Ballesteros. Golfista español de renombre internacional catalogado como uno de los mejores de la historia, pero sobre todo como un revolucionario en la reinterpretación de los cánones básicos asociados a este deporte.

Es por eso que en cierta manera tiene sentido que año tras año aparezca en nuestro país por estas fechas una de las sagas más importantes que intentan plasmar todo lo que el golf es capaz de ofrecer de manera digital. Tiger Woods PGA Tour 2014 vuelve a escena de nuevo capitaneado por el mejor golfista de todos los tiempos, con la enseña de representar de manera fiel la mayoría de elementos que convergen en la conformación de este deporte, y la actualización pertinente a todos los cambios que se producen año tras año.

En esta ocasión además, se presenta la versión de PlayStation 3 como única alternativa a la hora de poder adquirir el juego en España, con lo que los aficionados al golf que cuenten con esta consola están de enhorabuena. Más si cabe cuando en la misma portada el antes nombrado Severiano Ballesteros cuenta con una presencia destacada que se verá reflejada en el propio juego; siendo esto, junto con la implementación de nuevo de PlayStation Move, uno de los atractivos principales que se puedan extraer a simple vista. En cambio, las novedades, la evolución y sobre todo la diversión, se ponen a examen en las siguientes líneas.
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Jugabilidad

Como rey dispuesto sobre un trono que no se ve amenazado en absoluto, Tiger Woods PGA Tour 2014 no evoluciona demasiado en un aspecto jugable que sin embargo cuenta con una base totalmente estable que le aúpa a la categoría que disfruta la saga desde hace años. Una falta de innovación que en parte tiene que ver con haber ya alcanzado una amplia variedad de opciones de juego tanto online como offline, recibiendo éstas una ampliación en sus prestaciones en lugar de una revolución con una propuesta alternativa.

Pero primero de todo demos un repaso justamente a las herramientas de interacción que dispone el juego. De nuevo, el manejo total del golpeo de los hierros y de la pelota se centran en torno a un “stick” izquierdo en cuya sensibilidad y correcta eficiencia de uso se hallará el efectivo desplazamiento de la pelota. No será fácil en ningún momento medir la precisión, la potencia y la inclinación con la que desencadenemos cada golpe, teniendo una profundidad mucho mayor que el uso de un solo “pad” pueda llegar a aparentar.

Y es que, elementos como el giro, la velocidad o la aceleración que se le intente imprimir a este “stick” serán claves en las ejecuciones de los movimientos más típicos en el golf, como el drive y el approach. Además, el segundo “pad” diestro nos servirá para ajustar el apuntado antes de proceder al golpeo, orientándose el deportista por consiguiente hacia la dirección indicada, pero también cambiando la posición de los pies si de inicio limitamos la potencia o damos rienda suelta a ésta a la hora de poner en movimiento la pelota.

De normal, la propia interfaz del juego sugerirá por defecto los hierros adecuados para cada situación. Evidentemente, y sumando situaciones a los golpes anteriormente nombrados, no obtendremos el mismo resultado si usamos un palo inadecuado para sacar la pelota del bunker o para empujarla de manera rasa dentro del propio green. De todas formas, si deseamos innovar o no estamos de acuerdo con la propuesta del hierro que el juego nos señale, podremos cambiar en todo momento la herramienta para adaptarla a nuestra necesidad o estilo de juego.

Mientras tanto, los factores climatológicos serán de nuevo un obstáculo a tener en cuenta, pues el viento finalmente siempre resulta uno de los elementos más decisivos cuando intentemos realizar cualquier golpe, pero sobre todo aquellos que se ejecuten a más larga distancia. Por otro lado, la gravedad afectando a la pelota por la inclinación del terreno será el otro típico problema que sortear, pudiendo observar casi desde cualquier perspectiva la situación de la bola y la disposición del terreno, ayudándonos también de una indicaciones dinámicas que nos señalan el sentido de cada irregularidad.

Pero de la misma manera que esto repercute en el uso del “stick” izquierdo como base absoluta de todo, podremos optar por jugar echando mano de PlayStation Move en combinación con PlayStation Eye. Es complicado ver juegos en los que este dispositivo se adapte de manera tan eficiente a la mecánica, pues además resulta ideal para emular de manera convincente los movimientos del cuerpo enfocados a un objeto que debe transmitir fuerza a una pelota.

Estas buenas sensaciones se extraen sobretodo de una precisión bastante alta en la reproducción de ese típico balanceo, pues con la dirección al empuñar el mando, como con la aceleración que se imprima al moverlo, seremos capaces de obtener resultados similares a los que obtendremos con el “stick”. Tal vez cueste más alcanzar el punto justo, pero evidentemente la variedad de acción al reproducir un pequeño movimiento enfocado hacia otro de mayor recorrido, genera ciertas pérdidas en el traslado.

Fuese como fuere, tanto de una manera como de otra, lo que sí está claro es que el ritmo que toman las partidas es excesivamente lento. Evidentemente es algo bastante inherente a la mecánica del propio deporte en sí, pero el tiempo que se tarda entre golpeo y golpeo puede llegar a incordiar bastante, haciendo perder un poco cualquier tipo de enlace continuo que se pudiera llegar a alcanzar. La repetición de las mecánicas junto a estos tiempos muertos es uno de los mayores defectos que encontraremos dentro de Tiger Woods PGA Tour 2014

Los modos de juego

Una vez más, el modo carrera aglutinará de una manera clara el mayor interés a la hora de desarrollar un despliegue offline que nos llevé durante horas a explotar todas las capacidades jugables que hemos comentado un poco más arriba. La creación de un golfista hecho bajo nuestras consignas con hasta 24 estilos distintos donde escoger, será el primer paso para trazar un lazo por el cual tendremos que llevar a nuestro representado a lo más alto de la Professional Golfers’ Association. Y es que no pararemos hasta alcanzar nuestro objetivo mientras acometemos todos los torneos que forman el calendario de esta asociación.

Los añadidos típicos corresponden a la adición de más golfistas que amplían la lista hasta los 35 golfistas, con nuevos personajes jugables como Keegan Bradley o Cauley Bud. Pero también, esta vez tendremos la oportunidad de asaltar el Grand Slam pudiendo disputar Masters Tournament, U.S. Open, Open Championship y PGA Championship. Una constante en todos estos juegos que no puede faltar en esta nueva entrega.

Cabe destacar en esta entrega el esfuerzo por mejorar una faceta online que cuenta con hasta 24 jugadores en línea esta vez, viendo in situ la trayectoria que van adquiriendo los diferentes golpes de cada uno de los jugadores. Además, se añade un chat de voz que puede hacer muy amena la competición con todos aquellos contactos que estén dispuestos a disputar cualquiera de los torneos disponibles.

Pero sin duda, y en contraposición al modo de juego del título anterior en el que encarnábamos a Tiger Woods desde su infancia hasta una hipotética retirada por allá el 2019, esta vez nos encontramos con Legend of the Majors, un modo de juego que nos llevará a competir por seis etapas distintas de la historia del golf, enfrentándonos a nueves jugadores legendarios. Entre éstos se encuentran nombres tales como Severiano Ballesteros, Ben Hogan, Bobby Jones, Jack Nicklaus, Arnold Palmer, Gary Player, Sam Snead o Lee Trevino.

Esta modalidad alcanza una importancia mayor cuando se observa que la ambientación es total, recreando fielmente la estética correspondiente a esos eventos históricos del golf que tendrán cabida a lo largo de dicho recorrido. Será apreciable la evolución evidente que ha experimentado dicho deporte desde el 1800 hasta los días de hoy.

Por último, un añadido bastante interesante y relativo a la otra liga profesional de primer nivel que impera en el golf, que no es otra que la LGPA. La liga femenina estará presente en esta edición y nos permitirá disputar torneos como The Kraft Nabisco Championship bajo la jugadora que creemos con tal de alcanzar la supremacía en esta modalidad. Junto a nuestro alter ego, también estarán disponibles golfistas femeninas como Paula Creamer, Natalie Gulbis, Lewis Stacy, Suzann Pettersen y Lexi Thompson.
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Gráficos y sonido

Siguiendo un poco la línea continuista comentada anteriormente, Tiger Woods PGA Tour 2014 no cuenta con un cambio sustancial demasiado reseñable con respecto a su predecesor, y esto significa que tanto las virtudes como los defectos siguen estando presentes sin una variación demasiado destacada. Pese a todo, eso no lo aleja de una buena valoración en cuanto al acabado global que exhibe el título, que se apoya en unos determinados elementos para hacer creíble la ambientación de cada conquista por los 18 hoyos.

Uno de éstos estos es sin duda el gran modelado que exhiben todos los golfistas. La precisión con la que se han dibujado los trazos adecuados para representar a cada deportista es loable, heredando pues las buenas sensaciones que ya teníamos en títulos anteriores, pero mejorándolas levemente. Esto se refleja en unos detalles faciales que no carecen de detalles para reflejar de manera fiel los rasgos más característicos de cada integrante de la plantilla de golfistas que disponemos en el juego.

Este hecho se hace extensible a las animaciones, pues será incluso fácil reconocer a cada atleta solamente por la manera de golpear la pelota con cada movimiento característico. Un concienzudo trabajo que se viene desarrollando año a año y que da consistencia a la elección de las figuras más importantes, más allá de los típicos atributos. En este aspecto también, la física de la pelota y el impacto que le propina cada uno de los hierros tendrá una lógica convincente – como era de esperar –, repercutiendo esto en una forma de jugar que hemos explicado anteriormente.

Lo más destacado sin duda de este apartado recae en el cambio de las condiciones meteorológicas y el paso del día hasta el atardecer, notando en todo el contexto artístico un cambio relacionado sobre todo con la variación de la intensidad lumínica, que arrojará sobre los objetos un cambio cromático inherente a la abundancia o escasez de luz, pasando por los tonos anaranjados de la inminente llegada de la noche que de normal imposibilita la práctica de este deporte. Excepto en este juego, pues incluso a oscuras y con una pelota luminosa podremos disputar alguna que otra partida en los diferentes torneos.

Pero sobre todo vuelve a llamar la atención la ambientación que dispone el juego, aunque ésta no esté exenta de unos pocos defectos menores que ensombrecen un poco la que podría ser la mayor virtud visual de Tiger Woods PGA Tour 2014.Y es que, pese a la correcta disposición de todos los elementos necesarios que distinguen un campo de golf, el nivel de detalle con el que éstos están representados no está a la misma altura. Tanto el propio césped, como la arena, los puentes, los árboles o el propio público, podrían lucir a un nivel mucho mayor que el que muestran, siendo una asignatura pendiente que a finales de generación todavía no ha sido subsanada.

En cambio, pocas objeciones podremos ponerle al apartado sonoro, que una vez más acierta en un repertorio de temas que van muy acorde con todo lo relativo a este deporte. La música sosegada y atenuada será una constante que nos acompañará durante todas las partidas que vayamos llevando a cabo, ambientando correctamente todos los enfrentamientos que vayamos teniendo durante nuestras sesiones de juego. La lástima vuelve a ser contar sólo con voces en inglés, aunque peor aún es comprobar que todos los textos del juego vienen también en dicha lengua.

Por último y no por ello menos importante, los efectos estarán nuevamente muy bien definidos, diferenciando claramente el tipo de golpe que empleemos y el hierro que usemos para, acompañando a posteriori todos los sonidos que deriven de la trayectoria posterior de la pelota. De esta manera el bote de la misma lo oiremos perfectamente, distinguiremos cada choque dependiendo del elemento y, cómo no, escucharemos la característica caída de la pelota en cada hoyo. Todo ello mientras la multitud de público que se congregue reproduce sonidos dependiendo de las acciones correctas o incorrectas que hayamos llevado a cabo.
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Conclusiones

Un año más, y siendo PlayStation 3 la única opción en nuestro país para practicar el golf de manera virtual, Tiger Woods PGA Tour 2014 salta a la palestra como la mejor opción posible a la hora de emular la práctica de este deporte. Las virtudes se mantienen, profundizando además en ciertas modalidades de juego que se ven ampliadas con nuevas opciones, como es el caso del modo carrera y de la faceta online.

La saga sigue una línea continuista pues, y esto se demuestra en la implementación de pocas alternativas drásticas a lo visto anteriormente. En este aspecto, destaca la inclusión de Legend of the Majors, ya que conseguirá trasladarnos a épocas totalmente distintas con sus consiguientes cambios contextuales, pero también disfrutaremos controlando a los mejores golfitas de la historia. De la misma manera la LPGA acaba por completar todos los ámbitos en los que actúa este deporte hoy en día.

Pero también los errores se siguen conservando. El ritmo lento de desarrollo de cada fase dificulta un progreso fluido de la diversión, interrumpiendo continuamente la acción a la espera de ver el golpeo y movimiento del rival. Algo lógico y relativo al normal funcionamiento de este deporte, pero que trasladado a la parcela jugable se convierte en un inconveniente.

Junto a esto, los pequeños defectos gráficos que no acaban de pulir una buena propuesta artística que ambienta de manera adecuada los torneos, que gozan de los elementos necesarios para reproducir fielmente la situación típica en cada campo de golf. Una mayor definición de estos elementos daría más consistencia a esto, siendo sólo los modelados de los golfistas, así como sus animaciones, elementos destacables en esta parcela.


Lo mejor:

  • Sigue siendo la mejor propuesta posible para adentrarse en el mundo del golf.
  • Una jugabilidad sencilla, pero con detalles suficientes como para hacerla profunda.
  • Apartado artístico notable, con un modelado de personajes de buen nivel.

Lo peor:

  • Poca innovación con respecto a las anteriores entregas.
  • Defectos gráficos que desdibujan el acabado global.
  • Textos en completo inglés.

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Jugabilidad: 8
Gráficos: 7
Sonido: 7.25
Satisfacción: 7

Análisis

Tiger Woods PGA Tour 2014 sigue suponiendo la mejor opción a la hora de adentrarse en la práctica virtual de un deporte tan clásico como el golf. La falta de innovación y de propuestas alternativas suponen el principal inconveniente en esta ocasión, así como también lo son las imperfecciones de unos detalles gráficos que no están a la altura del notable trabajo ambiental.